Debido a la disminución de estrógenos que tiene lugar en la menopausia, distintas funciones del cuerpo de la mujer se ven afectadas, pudiendo en el trascurso de los años llegar a originar un mayor riesgo para su salud.
Dentro del riesgo oncogénico destacamos los siguientes cánceres, considerándolos los más comunes en este periodo:
CÁNCER DE MAMA
Es el tumor maligno más frecuente en las mujeres en el mundo occidental. Entre sus factores de riesgo destacan:
–Edad
–Antecedentes familiares y personales
–No tener ningún hijo.
–Primer embrazo después de los 30 años.
–La llegada de la menstruación muy joven.
–La retirada de la menstruación muy tarde.
–Etc
CÁNCER DE CUELLO DE ÚTERO
Es el cáncer que se desarrolla en edades más tempranas.
Dentro de sus factores de riesgo destacan:
–Infección por VIH.
–Múltiples compañeros sexuales.
–Inicio temprano de las relaciones sexuales con coito.
–Infección por virus del papiloma humano (VPH).
–Antecedentes de infecciones de transmisión sexual.
–Etc
CÁNCER DE OVARIO
Entre sus factores de riesgo destacan:
–Antecedentes familiares de cáncer de ovario.
–No tener ningún hijo.
–Edad.
–La llegada de la menstruación y su retirada tardías.
–Etc
CÁNCER DE ENDOMETRIO
Los factores de riesgo de este cáncer son entre otros:
–Obesidad.
–Tratamiento hormonal sustitutivo sin progesterona.
–Edad.
–Diabetes Mellitus.
–Aumento de los estrógenos de carácter androgénico.
–Etc
La presencia de estos factores de riesgo no implica la seguridad de desarrollar un cáncer, simplemente aumenta la probabilidad de ello. Las mujeres podemos hacer más de lo que imaginamos para disminuir el riesgo de padecer ciertas enfermedades, entre ellas el cáncer. Por tanto, pregunta a tu matrona las medidas más adecuadas según tu situación particular.
¡Nunca es tarde para cuidarte!